
Dentro del programa
Careers Guidance Project los alumnos de 4º de ESO y Bachillerato conocieron de primera mano lo que significa trabajar como investigador en un instituto científico.
Nuestros alumnos están ya definiendo su
futuro profesional. Algunos lo tienen ya muy cerquita, como los alumnos de 2º de Bachillerato. Otros, los de 4º de ESO, aún están eligiendo asignaturas e itinerarios. En este momento de su formación la conferencia de Guillermo Mínguez resultó esclarecedora para visualizar su futuro si se dedican a la investigación.
Guillermo Mínguez fue premiado hace dos años por la Fundación Princesa de Girona por su trabajo en la
investigación científica. Es un premio otorgado a profesionales jóvenes, de menos de 35 años.
Guillermo es sevillano pero reside desde hace 15 años en Valencia, trabajando en el
Instituto de Ciencia Molecular situado en Burjassot, a ocho minutos de nuestro colegio.
Cómo se trabaja en un instituto de investigación.
Nos explicó en qué consiste su
trabajo diario de investigación, rodeado de un equipo de especialistas con diferente formación: ingenieros, físicos, químicos, graduados en biomedicina… En un ambiente joven y dinámico se encuentran día a día investigando nuevos campos en el ámbito de la Nanociencia. El fracaso no lo consideran como tal, ya que entender por qué no ha salido algo implica el principio de otra investigación.
Su equipo de trabajo consta además de estudiantes de TFG máster, doctorado y postdoctorado. Todos investigan en el laboratorio cosas diferentes. Por las mañanas se establecen reuniones para ver qué se está probando y haciendo, y se va discutiendo Hay que ser muy crítico.
Aquí aprendimos que la Nanociencia estudia las propiedades de las partículas más pequeñas de la materia. Si dividimos un elemento en partes microscópicas cada una de esas partes posee una superficie y unas propiedades diferentes al material del que procede. Nos puso el ejemplo práctico del terrón de azúcar, que tarda más en disolverse que el azúcar granulado.
Un poco de historia
Nos explicó también que la Nanociencia es una disciplina muy joven, y que ha dado
Premios Nobel a sus investigadores. El más reciente, el Nobel de Física de 2016, fue concedido al equipo que descubrió las propiedades del
grafeno, un material procedente del grafito de un átomo de espesor.
El impacto de la nanociencia en la vida cotidiana
La Nanociencia, sin saberlo, ya ha impactado en nuestras vidas: pinturas de coches para que no se rayen, en móviles flexibles…
En medicina por ejemplo, se estudia reconocer la célula cancerígena y atacarla directamente.
También se aplica en el terreno del diseño industrial en la fabricación de artículos deportivos o en óptica con nuevos materiales para lentes o gafas.
El futuro es de los jóvenes
Nuestro conferenciante acabó animando a nuestros alumnos a esforzarse y a dar en todo lo que hagan el 100 por 100. Los jóvenes son los que tiene la
oportunidad de hacer cosas nuevas.
Puso como ejemplo la foto de un joven investigador de 24 años que ninguno reconocimos, después de poner antes la imagen que todos conocemos de
Einstein con su pelo blanco. Pues tenía truco: el joven de 24 años era el mismo Eistein a la edad en la que ganó el Nobel por la Teoría de la relatividad.
Dado que hay muchos alumnos que se decantan por el itinerario de
Letras, a la pregunta de un alumno respondió que tanto las Ciencias como las Letras aportan mucho a la humanidad, y hay que trabajar en equipo siempre desde ambos lados.
Guillermo acabó despidiéndose de los alumnos de 4ºESO hasta el día siguiente. Nuestro conferenciante participaba como asesor dentro del reto de
Cazadores de Talentos de la Fundación Princesa de Girona donde 4º participaba con varios equipos. Uno de ellos consiguió llegar a la final con su propuesta de app para ropa de alquiler. Pero esa es otra historia que merece ser contada en otro momento.
Nuestro agradecimiento a Guillermo Mínguez y a la Fundación Princesa de Girona por estas iniciativas tan enriquecedoras.